Festividad profundamente arraigada en la cultura occidental, a pesar de que su compleja historia está entrelazada con tradiciones religiosas y culturales paganas.
La Navidad es una celebración del cristianismo, donde se conmemora el nacimiento de Jesucristo. Sin embargo, el origen real de esta festividad es mucho más complejo de lo que se cree, y está marcado por la fusión de antiguas tradiciones religiosas y paganas.
En la antigua Roma, se celebraban dos festividades importantes en torno al solsticio de invierno: las Saturnales y las Brumales. Las Saturnales, que se realizaban del 17 al 23 de diciembre, eran unas fiestas en honor a Saturno, el dios de la agricultura y las cosechas. Durante estas celebraciones, se decoraban las casas con plantas, se encendían velas y antorchas para representar la nueva llegada de la luz, se hacían sacrificios, banquetes, juegos y se intercambiaban regalos.
Las Brumales, que se celebraban del 24 al 28 de diciembre, eran las fiestas que Rómulo instituyó para ser ofrecidas al dios Baco, las cuales también se dedicaban a Saturno y Ops. En estos festejos se realizaban ofrendas, juegos, se repartían grandes cantidades de comidas y bebidas, y se encendían hogueras para ahuyentar a los espíritus malignos de la oscuridad invernal.
Fiestas paganas a las que se le dio el nombre de Navidad
Se cree que la Iglesia cristiana adoptó el 25 de diciembre como fecha del nacimiento de Jesús con el objetivo de cristianizar estas festividades heréticas. De esta forma, los cristianos podían realizar celebraciones en esas fechas, pero dándoles un significado religioso.
El cristianismo comenzó a celebrar la Navidad en el siglo IV d.C., pero no fue sino hasta el siglo IX que esta festividad se estableció definitivamente en el calendario cristiano.
En el siglo IV, el papa Julio I fijó el 25 de diciembre como fecha del nacimiento de Jesús. Esta decisión se basó en varios factores, entre ellos la coincidencia de esta fecha con el solsticio de invierno, así como con las festividades paganas de las Saturnales y las Brumales.
A partir del siglo IX, la Navidad se convirtió en una festividad importante en la Iglesia cristiana. Durante esta época, se desarrollaron muchas de las tradiciones navideñas que conocemos hoy en día, como el árbol de Navidad, la misa de gallo y los villancicos.
Compartir en:

Por Explorarium Team
Equipo de redactores que colaboran con nuestra revista.